Aún en los tiempos en que ella no reinaba en este mundo, en la noche conseguía poseer a sus pocos acólitos, los femeninos, seres que viven sin reputación, no distinguía entre hombres y mujeres, siempre que ese cuerpo estuviera habitado por Amor, su hijo, vibración que los convertía en pura atracción, más atrayente que cualquier perfume, poder que desdibuja la materia hasta hacerla sublime. El único templo que quedó de Ella, el Cabaret y sus misterios, se veneraron en el Arte. A estos los conservó en lo mítico, supieron amar a su segunda hija, Libertas, cuando la Diosa voluntariamente se fue, atándose a su trono muchos de los que la amaron temerosos ante su abandono no entendieron su regalo y la traicionaron. Así nadie supo cuanto tiempo permaneció en la sombra; pretendieron ignorarla y en la ignorancia es donde les pudo mostrar lo que es vivir sin ella, pues eso es creer en la muerte.
Los que se mantuvieron en su culto viven en lo Eterno.
Amor, Libertad, Eternidad en la tierra, tu cuerpo. Me arrodillo para elevarme.
Dama Gunda.
Foto: Natalia V.S. Photography
Este es un blog dedicado al Art Burlesque y a las Pin Ups. Revisamos a las grandes diosas de la mitología: Proserpina, Ceres, Core y Venus, para saber lo que son los arquetipos vibrantes del verdadero Art Burlesque, donde el sentido del humor es el sentido más utilizado y dejamos salir a la diva que hay en nosotras... Porque siempre seremos nosotras mismas, con nuestros defectos e imperfecciones, pero también con nuestros talentos y carisma. Lo importante es ser auténtica.